El Gobierno de Tierra del Fuego dispuso este lunes por la mañana el cierre de la circulación desde y hacia la ciudad de Río Grande, así como el transporte interurbano entre Río Grande y Ushuaia, por la confirmación de 27 nuevos contagios de coronavirus durante el fin de semana. “Si es necesario, no salgan de sus hogares”, señaló Gustavo Melella, gobernador de la provincia, y agregó que “en el Día del Amigo, cuiden a los suyos evitando el contagio”.

La medida, que regirá por siete días, apunta a que los casi 100 mil habitantes de Río Grande no salgan de la ciudad, a su vez que restringe la entrada a la misma únicamente al personal catalogado como “esencial” y autorizado por el Ministerio de Salud provincial. Además, la nueva norma reduce las reuniones familiares, en quinchos o en salones de fiesta, antes permitidas para un total de 20 personas, a 10 asistentes como máximo.

El Intendente de la ciudad fueguina, Martín Pérez, se mostró preocupado por el nuevo brote de coronavirus y convocó a la población a “extremar las precauciones” para “evitar la aparición de más casos”. Según los datos del Ministerio de Salud, en Tierra del Fuego hay un total de 239 casos y sólo 1 muerte registrada.

A pesar de que el aeropuerto de la ciudad se encuentra cerrado desde el comienzo de la cuarentena, Río Grande se conecta, a través de la ruta nacional N°3, con Ushuaia y con el municipio de Tolhuin, al sur, y con el paso fronterizo San Sebastián, en el límite con Chile. En ambos sentidos, el tráfico vehicular se encuentra interrumpido y habrá “estrictos controles policiales” para evitar el ingreso y egreso de la ciudad por vías terrestres.

“Los alimentos que consumimos a diario continúan llegando por vía terrestre, igual que llegan aviones con medicamentos o vecinos e hijos de vecinos que estudian en el norte. Eso no lo podemos evitar y es un riesgo de contagio permanente”, afirmó Melella mediante un comunicado de prensa difundido por el Gobierno de Tierra del Fuego.