La inflación de Argentina se desacelerará por tercer mes en junio

Se pronostica que la inflación en Argentina se desacelerará por tercer mes consecutivo en junio ya que la estricta política monetaria, los controles de precios y los esfuerzos para minimizar la volatilidad de la moneda enfrían la demanda en la segunda mayor economía de América del Sur. Los precios al consumidor probablemente aumentaron un 2,6% respecto a mayo, de acuerdo con la media de pronósticos de cinco economistas encuestados por Bloomberg, frente a un incremento del 3,1% en el mes anterior. Tal ritmo representaría un mínimo en lo que va de 2019. Las autoridades han enfatizado la importancia de un peso estable para mantener la inflación en un camino descendente a medida que la economía se estabiliza. La publicación de los datos de junio el martes es el último informe de inflación antes de las elecciones primarias del 11 de agosto, la primera prueba de fuego para las posibilidades de reelección del presidente Mauricio Macri. Los inversores estarán muy atentos y considerarán los resultados como una amplia encuesta nacional ya que solo hay una fórmula a la presidencia para cada coalición. Unos malos resultados por parte del actual gobernante podrían ejercer presión sobre el peso.

Al igual que en los últimos meses, el presidente del banco central, Guido Sandleris, tiene previsto hablar con la prensa cuando se publiquen las cifras. Datos clave El Fondo Monetario Internacional otorgó a Argentina más munición en futuros de dólar para mantener el peso bajo control. El peso argentino es la segunda moneda de mejor desempeño de los últimos 30 días, entre las 32 principales monedas seguidas por Bloomberg, solo por detrás del rand de Sudáfrica. La encuesta de economistas más reciente realizada por el banco central proyectó un IPC del 2,6% m/m para junio; el pronóstico de inflación para finales de 2019 se redujo a 40,0% desde 40,3% previamente. Un congelamiento de precios en los servicios públicos y tarifas de transporte introducida por el Gobierno ayuda a mantener baja la inflación.