Otra veda en la pesca por la bajante del Paraná

Preocupación entre los malloneros, que empezaron a reunirse para ver cómo afrontarán la prohibición de entrar al río a buscar el sustento.

La veda total de la pesca en aguas del río Paraná por la histórica bajante, que ayer registró una altura de apenas 92 centímetros en el Puerto de Barranqueras, nuevamente causó malestar en los malloneros, principalmente del barrio San Pedro Pescador y de la Isla del Cerrito.

La veda total de la pesca en aguas del río Paraná por la histórica bajante, que ayer registró una altura de apenas 92 centímetros en el Puerto de Barranqueras, nuevamente causó malestar en los malloneros, principalmente del barrio San Pedro Pescador y de la Isla del Cerrito.

Como cada vez que se impone esta medida para preservar el recurso ictícola provoca algunas reacciones en el ámbito de los pescadores, especialmente en el comercial, ya que unas 300 familias viven de lo que extraen del Paraná.

Pescadores del Cerrito empezaron a mantener contactos para analizar la situación, porque que el Paraná repunte su caudal es una incertidumbre al igual que el retorno a la pesca.

Se trata de un grupo de Pescadores Autoconvocados, que ya plantearon su situación durante el conflicto a mediados de año en la Isla. Manifestaron su preocupación y descartaron que ‘haya alguna ayuda de parte del gobierno ante esta nueva situación, hasta ahora‘.

Aseguraron que ‘la veda cayó justo en un escaso precio del pescado y no se pudo juntar plata‘, por lo que ‘estamos tratando de hacer un movimiento porque en la isla el 40 por ciento vive de la pesca‘.

El nuevo cuadro de situación se da a partir de que la Secretaría de Desarrollo Territorial y Ambiente del Chaco activó lo dispuesto en la resolución 1078 de este año, que impone la prohibición total de sacar peces tanto para los pescadores deportivos como para el sector comercial, cuando el hidrómetro se desplome a menos de 1 metro de altura.

El último conflicto por la pesca se dio en mayo de este año.