Rafael Grossi, el embajador argentino en Austria que fue seleccionado para dirigir el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) -la agencia más importante del mundo en materia de seguridad nuclear-, asumió hoy su cargo con un mensaje en el que ha subrayado que “la energía nuclear no es parte del problema en el cambio climático pero si puede ser, para quien así lo quiera, parte de la solución”.

En un encuentro de los 171 Estados miembro de la agencia, ha sido designado por unanimidad como director general por cuatro años y se dirigirá como primera funcion, a la Cumbre del Clima (COP25) en Madrid.

“En contra de los que muchos podrían haber pensado, la energía nuclear va en aumento”, ha dicho Grossi, quien ha asegurado que, en los últimos años, se han iniciado las obras de más de una treintena de centrales en todo el mundo.

El nuevo jefe de la AIEA ha admitido que este tipo de instalaciones pueden generar dudas en cuanto a seguridad, pero se ha comprometido a que la agencia mantendrá la vigilancia “para asegurar que todo se hace en beneficio de las sociedades”, sin peligro alguno.

A partir de hoy, Grossi deja su cargo como representante argentino en Austria para asumir el mando del organismo nuclear. Según fue publicado hoy en el Boletín Oficial, se establece que “el señor Embajador Extraordinario y Plenipotenciario D. Rafael Mariano Grossi cesará en sus funciones como Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de la República en la República de Austria, el día 2 de diciembre de 2019”.