Sostener el acuerdo con el FMI será el gran desafío para Lacunza

Consideran que el nuevo ministro tiene la solvencia necesaria para hacer frente a la transición. Luego de las elecciones, de acá a dos meses, podrían comenzar a acomodarse cuestiones vinculadas al acuerdo con el FMI.

Los economistas coinciden en que sostener el acuerdo con el FMI será uno de los principales desafíos que tendrá que llevar adelante el flamante Ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, que asumirá luego de la renuncia de Nicolás Dujovne.

“Para mí el problema no es tanto el tema del déficit sino la sostenibilidad de la deuda. El déficit se lo puede hacer cerrar. Pero de la deuda probablemente le caiga la pelota al próximo Gobierno”, señaló Fausto Spotorno, director del Centro de Estudios Económicos de la consultora Orlando Ferreres.

Con todo, destacó que el próximo desembolso del FMI —unos USD 5.400 millones que se esperan para después del 15 de septiembre— no debería correr demasiado riesgo. “Al tercer trimestre las metas fiscales se van a cumplir. El problema es el cuarto trimestre y hay que tener en cuenta que la inflación generará mayores recursos recaudatorios”, sostuvo.

“Con el cambio de Dujovne parece esconderse el principal culpable, que es la política. Mauricio Macri, Marcos Peña y Jaime Durán Barba interfirieron para descarrilar las cuentas públicas y son responsables del evento del 28 de diciembre 2017, la antesala de la crisis del 2018″, explicó —en off— un economista de origen liberal, pero crítico con el Gobierno desde hace varios años.

“El primer desafío de Lacunza son los políticos irresponsables que tratan de culpar a otros de los problemas. Luego lo obvio, son dos meses hasta las elecciones tratando de enfriar, y luego 45 días muy diferentes hasta 10 diciembre porque allí pueden acomodarse muchas cosas“, resumió.

Durante los dos meses previos a las elecciones, recomienda que haya mucha responsabilidad por parte del Banco Central (BCRA) y se tome la decisión de “aguantar” para que fisco no descarrile. “Lacunza tiene la solvencia para esta transición. El problema es que está rodeado por políticos que todavía aspiran a milagros de corregir en 60 días lo que no supieron entender en cuatro años”, agregó.