Un avance en el diagnóstico del virus del dengue

Investigadores de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) y del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) desarrollaron una tira reactiva que permite detectar el virus del dengue en diez minutos a un costo bajo, sin necesidad de análisis complejos y que puede realizarse en laboratorios de todas las regiones del país. El ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Roberto Salvarezza, el ministro de Salud, Ginés González García, el rector de la UNSAM, Carlos Greco, y la presidenta del CONICET, Ana Franchi, fueron los encargados de presentar el desarrollo científico en el campus de la universidad. “Es una tira reactiva similar a las que se usan para los test de embarazo, pero para dengue. Nos llevó cinco años de trabajo y la participación de investigadores de diferentes especialidades, estudiantes de grado y posgrado, y médicos. Estos proyectos no se hacen solos”, explicó Juan Ugalde, decano del Instituto de Investigaciones Biotencológicas (IIB) de la UNSAM y uno de los líderes de este desarrollo, junto a Diego Comerci, Andrés Ciocchini y Diego Álvarez. Durante la presentación, Salvarezza sostuvo que “estamos viendo el desarrollo de investigadores del CONICET, de la UNSAM, en una empresa de base tecnológica incubada acá en el campus de la Universidad de San Martín y la Fundación Argentina de Nanotecnología, que ha permitido el desarrollo de un test muy rápido que posibilita el diagnóstico en los primeros cinco días de fiebre. En un contexto en el que hay una situación de riesgo en toda la región, me parece que es un hecho muy importante para la salud pública de nuestro país”. Por su parte, Ginés González aseguró que “venimos a ver un producto argentino que va desde la investigación y el desarrollo hasta la producción, que va a mejorar mucho el diagnóstico precoz y la capacidad operativa del Ministerio de Salud. Es fundamental que la ciencia, la tecnología y la investigación argentina se pongan al servicio de las necesidades de nuestro país”. Por último, Franchi expresó que “este desarrollo demuestra que nuestros investigadores, además de ser excelentes en investigación básica, pueden llevar a la práctica muchas de sus investigaciones. Este emprendimiento es absolutamente inspirador para los jóvenes que quieren dedicarse a la ciencia y la tecnología porque pueden ver cómo, a partir de sus investigaciones, es posible desarrollar un producto que va a colaborar con la salud humana.” Sobre el desarrollo tecnológico Las tiras reactivas funcionan como el conocido “evatest”: la segunda raya indica un caso positivo de dengue. En este caso, las muestras que se aplican en las tiras no son de orina, sino un derivado de la sangre: suero o plasma. LA ANMAT, el organismo que regula medicamentos, alimentos y tecnología médica a nivel nacional, aprobó días atrás las tiras reactivas para dengue. De este modo, se habilitó la producción de este novedoso método de detección que cuenta con tres ventajas claves: no requiere de equipamientos sofisticados, no necesita operadores con alta calificación y tampoco necesita cadena de frío. Estas características permiten que la prueba de detección se realice en laboratorios de todo el país, descentralizando el análisis de muestras cuando se producen los picos de propagación del virus. La detección del virus del dengue, transmitido por el mosquito Aedes aegypti, sigue un algoritmo que incluye dos métodos diagnósticos diferentes según la cantidad de días que presente el paciente con fiebre. Cuando la fiebre lleva menos de cinco días, el protocolo busca identificar al virus (prueba NS1), cuando lleva más de cinco días, busca identificar a los anticuerpos con el que el sistema inmunológico responde a la presencia del virus (prueba IgM). En cualquiera de los dos casos, tomar la muestra y analizarla implica cercanía con un laboratorio o un despliegue logístico. En este sentido, el desarrollo de los investigadores de la UNSAM y el CONICET resuelve ese problema de un modo económico, a partir de una innovación tecnológica. Además, evita la importación de insumos para los métodos de detección que existían hasta hoy. Los anticuerpos se desarrollan luego de que el virus deja de circular en sangre, pero aun así, la tira desarrollada permite identificar a los anticuerpos en los primeros cinco días. “En esos casos la sensibilidad de nuestras tiras baja del 95% al 80%, es decir, que detecta 8 de cada 10 casos. De todas formas, es muy útil esa capacidad diagnóstica, cuando la alternativa es esperar a que la muestra viaje a un hospital o centro y demore varios días. El procedimiento con nuestras tiras lleva 10 minutos”, dijo Ugalde. El grupo de científicos del Instituto de Investigaciones Biotecnológicas de la UNSAM ya ha desarrollado otros dispositivos diagnósticos para brucelosis y Síndrome Urémico Hemolítico (SUH), para los cuales han obtenido la aprobación de SENASA y ANMAT. Son ocho productos considerando variedades que afectan a caprinos, bovinos, ovinos, caninos y cerdos en el caso de la brucelosis, y que en algunos el diagnóstico puede ser con tiras reactivas y/o en laboratorio.