Para intentar que, al menos en el acceso a la educación, las personas con discapacidad cuenten con las mismas oportunidades, se presentó este miércoles una iniciativa que busca, a través de una web, facilitar a los alumnos y sus familias información sobre los obstáculos a enfrentar en las escuelas y las herramientas que pueden utilizarse para exigir que, efectivamente, se cumpla el derecho básico a la educación inclusiva.  Para ello, una coalición de organizaciones de la sociedad civil -la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) y el colectivo Grupo Artículo 24 por la Educación Inclusiva, entre ellas- lanzaron porunaeducacioninclusiva.org, un sitio web que permite, entre otras cosas, acceder a modelos de reclamo para que las familias o personas con discapacidad presenten ante las escuelas, o los Ministerios de Educación y Salud, entre otros organismos.

Las razones. La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (ley 27.044), establece en su artículo 24 que las personas con discapacidad tienen derecho a estudiar y aprender en escuelas comunes con los apoyos y ajustes que sean necesarios, y que no pueden quedar excluidas del sistema general de educación. A nivel local, la Resolución N°311/16 del Consejo Federal de Educación -obligatoria en todas las provincias-, también reconoce el derecho de la niñez y juventud con discapacidad a estudiar en la escuela común en todos sus niveles, a que el sistema educativo le provea los apoyos y ajustes y a recibir títulos en igualdad de condiciones. Sin embargo, “en Argentina, las personas con discapacidad son excluidas de las escuelas comunes, que rechazan su matriculación, y relegados a recibir una educación segregada y de inferior calidad en escuelas especiales”, dicen desde ACIJ.

Según datos provistos por esa ONG, en el país 115.917 niños y niñas con discapacidad son segregados en escuelas especiales, lo que supera a la cantidad que concurre a la escuela común. Al mismo tiempo, quienes desarrollan sus trayectorias educativas en el sistema regular, también sufren situaciones de discriminación que limitan su real inclusión, tales como la derivación a escuelas especiales llegado un determinado año o nivel, la falta de adopción de medidas de accesibilidad y ajustes, la falta de provisión de personal de apoyo a la inclusión, la reducción discriminatoria de la jornada escolar, la imposición de permanencias y la negativa de títulos primarios y secundarios.