Alarma en la Copa América por la falta de público

Si el público es el alma del fútbol, la Copa América de Brasil 2019 está carente de ella, con estadios casi vacíos en los primeros días de competición que muestran el escaso interés que los brasileños pusieron en este torneo donde su selección tiene mucho que perder y poco que ganar.

En Brasil, un país que vive y respira por y para el fútbol, la Copa América resulta indiferente para la mayoría de su población, desinteresada en gran parte en seguir a la Canarinha y aún menos al resto de equipos.

En la actual edición, el promedio de espectadores en los cinco primeros partidos fue de 25.801, casi la mitad menos que hace tres años, y los números se asemejan más a la edición de 2015 en Chile, cuyo promedio fue de 25.223 espectadores por partido.

La diferencia entre 2015 y ahora es que en Chile la mayor parte de los estadios tenían entre 15.000 y 30.000 asientos y el más grande era el Estadio Nacional con 50.000 espectadores, mientras que en Brasil la cancha más pequeña para esta Copa América es el Arena Corinthians con 47.000 asientos.

Esa gran cantidad de butacas desocupadas en los estadios construidos para el Mundial de 2014 deja una atmósfera fría, atípica y casi íntima, que por momentos da la sensación de un partido a puerta cerrada, a las antípodas del fervor e intensidad con que las aficiones sudamericanas viven los partidos de sus selecciones.

Así pasó el domingo cuando para el Paraguay-Qatar (2-2) acudieron menos de 20.000 espectadores al mítico Maracaná, un estadio que tiene el récord de asistencia en la Copa América al reunir a 150.000 personas en la final de 1989, aunque actualmente su aforo está limitado a 74.000 espectadores.

Otra pobre entrada se vivió ese mismo día en el Mineirao, de Belo Horizonte, un recinto con aforo para 60.0000 personas al que acudieron poco más de 13.000 para el Uruguay-Ecuador (4-0). Una baja asistencia de también 13.000 espectadores se vivió en el Venezuela-Perú, que se disputó en el estadio Arena do Gremio, de Porto Alegre, cuya capacidad es para 55.000 personas.

Los dos encuentros que maquillan de momento el promedio de asistencia de esta Copa América es Argentina-Colombia (0-2) que presenciaron más de 35.000 espectadores en el Arena Fonte Nova, de Salvador de Bahía. También el partido inaugural entre Brasil y Bolivia (3-0) jugado el viernes en el Morumbí de Sao Paulo, al que fueron 47.000 personas pero no se llenó.