Tanto los laboratorios como el sector que importa reactivos de diagnóstico médico habían denunciado trabas a la importación que ponían el peligro el abastecimiento en los próximos meses. El Banco central y el Ministerio de Salud decidieron hacer caso al pedido y flexibilizaron la normativa cambiaria.

El Banco Central (BCRA) decidió aflojar el cepo cambiario para algunos insumos farmacéuticos y de diagnóstico. Semanas atrás, tanto laboratorios como el sector de reactivos habían alertado por los faltantes de material médico que podían complicar la prestación de servicios de salud en los próximos meses.

Luego de varios reclamos de las cámaras sectoriales ante el Ministerio de Salud y el BCRA, finalmente este jueves la autoridad monetaria dispuso exceptuar de los requisitos para acceder a dólar oficial para pagar las importaciones sobre productos farmacéuticos y/o insumos, en la medida que sean utilizados para elaboración local.

Así, ya no estarán sujetas al cupo de importaciones incremental en relación con años previos (que establecía un tope de dólares para 2022 equivalente al 105% de lo que habían importado en 2021 o al 170% de las compras al exterior realizadas en 2020).

Tampoco tendrán que pedir financiamiento a 180 para poder realizar esas importaciones al tipo de cambio oficial, tal como establecían las normas previas. Por el contrario, tendrán acceso “a la vista” al mercado oficial de cambios, luego de presentar una declaración jurada firmada ante su banco en la que afirmen que los productos se usarán en la fabricación local de medicamentos.

Qué medicamentos ingresarán al país sin trabas cambiarias

La flexibilización no abarca a cualquier producto, sino a un listado de 27 posiciones arancelarias de la nomenclatura común del Mercosur. Fundamentalmente, se trata de insumos farmacéuticos. Según el listado que figura en la Comunicación “A” 7507, algunos de los productos liberados son:

• Sangre humana; sangre animal preparada para usos terapéuticos, profilácticos o de diagnóstico; sueros con anticuerpos.
• Vacunas, toxinas, cultivos de microorganismos (excepto las levaduras) y cultivos de células.
• Medicamentos (acondicionados o no para la venta minorista) que contengan penicilina o sus derivados.
• Antibióticos con penicilinas y sus derivados.
• Insulina.
• Provitaminas y vitaminas, naturales o reproducidas sintéticamente.
• Glándulas y demás órganos para usos tratamientos médicos.
• Heparina.

Los laboratorios obtuvieron una liberación más importante para la importación de insumos que los reactivos de diagnóstico. Entre las posiciones arancelarias que este último sector había sugerido al BCRA para que liberara, solamente una se incluyó en la comunicación publicada este jueves (la que hace referencia a sangre, sueros con anticuerpos y vacunas, entre otros productos).

Por el contrario, el sector seguirá esperando por la apertura del comercio exterior para la compra de:

• Medios de cultivo preparados para el desarrollo o mantenimiento de microorganismos (incluidos los virus y organismos similares) o de células vegetales, humanas o animales.
• Reactivos de diagnóstico para la separación de células para uso en trasplantes.
• Tubuladuras para trasplantes.