En medio de los pedidos de apertura de actividades durante de la cuarentena, el golf hizo una particular solicitud por intermedio de la Asociación Argentina (AAG) de la actividad. Mediante una carta enviada al secretario de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, el organismo presentó un protocolo de seguridad para que el Gobierno autorice la práctica del deporte en medio de la pandemia de coronavirus.

En una carta firmada por el presidente de la AAG, Andrés Schonbaum, y el director ejecutivo, Miguel Leeson, la entidad fundamentó su pedido con el argumento de que el golf “es un deporte que en su esencia se puede practicar sin poner en riesgo a quienes lo practican ni a terceros” ya que “se juega al aire libre” y “no hay contacto físico”. Además, explicaron que de esa forma se podrían preservar unos 4000 puestos de trabajo de empleados de clubes relacionados con la actividad.

“Nos dirigimos a usted a fin de solicitarle tramite ante autoridades nacionales, provinciales y municipales la posibilidad que en el marco de las regulaciones y protocolos vigentes vinculadas a la pandemia de COVID 19, se autorice la práctica del golf bajo los protocolos que a continuación detallamos”, comenzó la carta que le enviaron los dirigentes a Lammens.

En el desarrollo de la misiva, la entidad explica las razones por las que considera que la actividad se puede seguir llevando a cabo. “Motiva la presentación la realidad que el golf es un deporte que en su esencia se puede practicar sin poner en riesgo a quienes lo practican ni a terceros. Se juega al aire libre, no hay contacto físico, el distanciamiento social es sencillo de aplicar, cada jugador juega con su equipamiento y ni siquiera comparten la pelota”, indicaron las autoridades golfísticas, que además argumentaron que varias actividades exceptuadas conllevan un peligro mayor que la practica del golf.

“La administración de turnos, cobro de aranceles es mínima (con protocolos de seguridad vigentes) y en muchos casos se puede hacer online. Asimismo, la apertura del golf supone un grado de riesgo sensiblemente menor que el de muchas de las actividades actualmente exceptuadas”, explicaron.

Otro de los argumentos esgrimidos es que en países con mayor número de contagios y muertos, la actividad no se restringió pese a las respectivas cuarentenas. Además compararon la situación con países vecinos de la región. “Es de público conocimiento que muchos países incluso algunos fuertemente afectados por el COVID 19, tales como Alemania, Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, España etc. tienen abiertos o están abriendo sus campos y de hecho consideran el golf como una actividad beneficiosa tanto para salud física como psicológica. En el mismo sentido están actuando países de la región como Uruguay, Paraguay y Chile entre otros”.

En la carta los dirigentes manifestaron que en la práctica de golf en Argentina se lleva a cabo en 22 provincias mientras que dijeron que son 304 clubes afiliados distribuidos en unos 180 municipios “del más variado tamaño y distribución geográfica” y que hay “50.000 jugadores matriculados”.

Luego detallaron una propuesta de “protocolo obligatorio” en la cual expresaron:

– Las salidas serán de un máximo de cuatro personas, con un intervalo mínimo de 12 minutos para la siguiente salida. Y en caso de utilizar carros motorizados, sólo podrá salir un jugador por carro con proceso de desinfección.

– Se mantendrá en todo momento el distanciamiento social de mínimo dos metros., recomendando especial cuidado en tees de salida y greens.

– Se recomienda el frecuente lavado de manos durante la vuelta (alcohol en gel) y no llevarse manos a la cara.

– No tocar o compartir palos, pelotas u otro equipamiento con cocompetidores.

– Se recomienda jugar sin guante.

– Juego obligado con “bandera puesta”.

– Se retiran todos los rastrillos de la cancha (alisar bunkers con palo y pies).

– Evitar saludos con contacto físico entre jugadores.

– Los clubes no tendrán habilitados lugares comunes de reunión de gente, los baños públicos deberán tener todas las condiciones de higiene y seguridad. Los vestuarios y duchas permanecerán cerrados.

Otro argumento esgrimido por la Asociación fue el tema económico y la preservación de fuentes de trabajo de empleados de los clubes. “La vuelta al golf bajo este protocolo permitirá a los clubes volver a generar ingresos que son fundamentales para poder pagar los sueldos de sus empleados que se estiman en por lo menos 4000 empleos directos en todo el país”, esgrimió la AAG.

“La apertura controlada y segura de la actividad permitiría a los clubes el cobro de sus cuotas sociales fundamentales para la preservación de los puestos de trabajo y de la existencia misma de cientos de clubes en todo el país”, concluyó la carta.