El pedido es por 160 millones de pesos y el intendente buscará esos recursos tanto en el sector privado como en la banca pública. Incluso no descarta emitir bonos o letras que le permitan contar con esos fondos.

El intendente fundamentó el pedido asegurando que “ante la gravedad de la situación epidemiológica y el desborde del contagio comunitario de la enfermedad viral, se implementaron múltiples acciones y medidas, tanto en el orden nacional, provincial y municipal, orientadas a disminuir, controlar y/o evitar la propagación del virus, restringiendo la circulación de personas y bienes limitando el desarrollo de actividades determinadas”.

“En ese contexto, se generó no sólo una crisis sanitaria sino también económica a nivel mundial sin precedentes en los últimos cien años, afectando al país, a la provincia y, obviamente, a la ciudad de Resistencia”, comentó.

Requirió $ 160 millones. Aseguró que la situación actual impide cumplir en tiempo y forma el pago del sueldo complementario.

Entre los proyectos entrados y que, en la sesión del Concejo capitalino, serán ingresados, aparece un pedido de financiamiento solicitado por el intendente Gustavo Martínez, que se usará para pagar el aguinaldo.

“El escenario produjo un fuerte impacto económico negativo sobre las finanzas municipales a lo largo de todo el año, donde el resultado financiero al primer semestre del año fue del – 12,6 % de los recursos”, detalló.

“Que la recaudación de los recursos propios y el ingreso de fondos provenientes de la participación municipal con relación a la inversión salarial proyectada indicaría la imposibilidad de cumplir en tiempo y forma con la obligación”, denunció.

Ahora el pedido de empréstito no está solo, sino que hay un paquete que incluye la prórroga para presentar el proyecto de presupuesto para el próximo año y no hay que descartar que también se gire una propuesta de ordenanza general tributaria. Este tema se aprobaría en la sesión. Entre otras cosas, Martínez señaló que resta aprobar el Plan Director de Servicios que es de vital importancia porque aumenta la eficacia de los servicios que se prestan y disminuye los costos que se trasladan al contribuyente capitalino.