Presentarán el Plan Nacional de Lectura

Fue creado durante la presidencia de Raúl Alfonsín en 1984 y completamente desmantelado por el gobierno de Mauricio Macri en el año 2016. El fin del plan es promover la lectura y llegar a 10 millones de niños, niñas y adolescentes.

Este lunes a la mañana en el museo Casa Rosada, Nicolás Trotta, Ministro de Educación de la Nación, junto al presidente Alberto Fernández, acompañados por escritores, editores y trabajadores de los sindicatos vinculados al sector gráfico, volverán a lanzar el Plan Nacional de Lectura que fue creado durante la presidencia de Raúl Alfonsín en 1984 y completamente desmantelado por el gobierno de Mauricio Macri en el año 2016. El plan se propondrá llegar a 10 millones de niños, niñas y adolescentes, y también a sus familias. Las escritoras Laura Devetach y Claudia Piñeiro van a leer fragmentos de cuentos.

Además de promover la lectura, el programa que fue continuado por la gestión de los Ministros de Educación Daniel Filmus, Alberto Sileoni y Juan Carlos Tedesco, había logrado llegar a 2.254.721 personas; distribuyó gratuitamente 40.000.000 de ejemplares de cuentos y poemas y más de 15.000.000 de libros en escuelas y espacios no convencionales de todo el país. En octubre último, el macrismo había desechado un centenar de libros que provenían de dicho plan en contenedores de basura ubicados detrás del Palacio Pizzurno. Hoy, la dirección del Plan Nacional de Lectura estará a cargo -tal como lo había anunciado Trotta en el Congreso Pedagógico de Chaco- de Natalia Porta López, una escritora que cuenta con una larga trayectoria de trabajo en la Fundación Mempo Giardinelli.

El Ministro de Educación de la Nación, expresó que “este lunes presentaremos el Plan Nacional de Lectura y alfabetizaciones que se vincula a lo que nosotros consideramos que es una política central en términos educativos para los tiempos que vienen”, a su vez, Trotta indicó que el plan permitirá que “todas las familias argentinas se puedan apropiar del derecho a la lectura como una herramienta que tendrá impacto, no solo en los procesos de aprendizaje en la escuela, sino también como una herramienta transformadora que logrará que los padres y los hijos puedan encontrar un lugar de lectura en común”.