SAMEEP y Educación garantizan agua potable a escuela rural

Generamos transformaciones en materia de infraestructura atendiendo a la demanda del Ministerio de Educación a través del programa de Asistencia Sanitaria Institucional que brinda ambientes sanos a las comunidades educativas.

El presidente de SAMEEP, Ing. Leonardo Aguzín junto al Subsecretario de Coordinación Presupuestaria y Financiera del Ministerio de Educación del Chaco, Cdr. Rodrigo Morilla constataron las obras en la escuela N° 81 “Josefa Femenia” del Paraje Villa Jalón que se encuentra a 4 km de Puerto Tirol.

Allí se  realizó una  extensión de red de agua potable a través de 1200 metros con un caño de PVC de 63 mm hasta el frente de la escuela rural y se ingresó al establecimiento con 50 m de cañería de polietileno de 3/ 4 pulgadas. Además, se incorporará un tanque de reserva y una bomba de impulsión para abastecer de agua potable y brindar saneamiento  con la instalación de sanitarios que se realizará en los próximos días.

Al respecto el presidente contó: “Destaco el trabajo que tenemos con el Ministerio de Educación para poder llegar al 2022 con el 100% de las escuelas del Chaco, garantizando el acceso al agua potable a los chicos y chicas de toda la provincia. Para mi es básico y un compromiso que asumí al iniciar esta gestión”. Y sumó: “En este contexto de pandemia debemos ser solidarios y mostrar el potencial que tiene el público.  Vamos a contribuir con todo lo que se pueda hacer y cubrir necesidades en materia de agua y cloacas a escuelas y hospitales de toda la provincia”.

Por último, completó: “El programa ASI es un orgullo porque es una suma de pequeñas victorias junto a organismos del Estado con el liderazgo del Ministerio de Educación y el aporte que podemos hacer desde SAMEEP. Ya tenemos 10 escuelas en este período que tienen completo el sistema de abastecimiento de agua potable con los elementos sanitarios y que garantizan el acceso a cientos de estudiantes”.

La escuela rural se encuentra a 4 km de Puerto Tirol a la que asisten chicos y chicas de la zona que realizan largas caminatas o llegan en bicicleta para completar su escolaridad primaria.

Lidia Ríos, directora del establecimiento agradeció las obras detallando las necesidades por las que debían pasar para brindar el servicio educativo cada día: “celebramos que se haya realizado esta gran obra, luego de pasar muchos años tocando muchas puertas. Estoy agradecida a cada una de las personas que están haciendo esto para toda la comunidad educativa”.

“Fue muy difícil en este contexto de pandemia. Teníamos un aljibe, que en determinado momento deja de tener agua potable, debido a las roturas que tiene, lo cual era un problema porque solo se podía utilizar para la limpieza del establecimiento y no podíamos usarlo para consumir. Traíamos bidones de 20 litros o contábamos con la asistencia de bomberos voluntarios o el municipio para darles el desayuno y almuerzo a los chicos. Este es un cambio de vida para nosotros”, concluyó Ríos.