Un estudio llevado adelante en China segura que toser hacia abajo ayuda a reducir la propagación del coronavirus y de las “gotitas respiratorias”.

Hongping Wang, Zhaobin Li, Yi Liu, Lixing Zhu y Zhideng Zhou encabezaron un estudio al que decidieron titular “La dispersión de gotitas generadas por la tos de una persona”. Enfocaron sus recursos en investigar si toser hacia abajo ayuda o no a reducir el contagio de coronavirus y la dispersión de los gérmenes.

“La dispersión de las gotas generadas por la tos de una persona que está orientada hacia arriba o hacia abajo se investigó mediante un experimento de laboratorio en un túnel de agua”, detallaron los investigadores del estudio realizado para el Laboratorio de Mecánica No Lineal de la Academia de Ciencias de China. Vinculado a esto, el experimento se llevó a cabo con un maniquí montado en ángulos de inclinación frente al flujo entrante para imitar a una persona que tose hacia abajo o hacia arriba y supuestamente tiene coronavirus.

Por otro lado, en los experimentos del túnel de agua los especialistas realizaron mediciones detalladas de la velocidad y visualización del flujo. “Para investigar la influencia de la posición inicial en el movimiento de las partículas, se adoptó un enfoque de partículas virtuales para simular la dispersión de partículas utilizando el campo de velocidad medido”, complementaron los científicos chinos.

Para el caso los que tosen hacia arriba, las partículas se concentran debajo del hombro de la persona y se mueven hacia abajo con una corta distancia de viaje. “En el caso de los que lo hacen hacia abajo, las partículas que se dispersan sobre la cabeza de la persona se desplazan a gran distancia. También encontramos que el movimiento de las partículas está estrechamente relacionado con la posición inicial”, complementaron en el estudio.

Hacia el final publicaron los resultados de este estudio y recomendaron que debemos “toser con la cabeza hacia el suelo para asegurarnos de que la mayoría de las gotas entren en la región de estela”.