Unicef: más de un millón de niños saltean comidas

Lo mismo hacen tres millones de adultos para que sus hijos se alimenten y en uno de cada 4 hogares necesitan pedir préstamos para comprar comida, según la Encuesta Rápida sobre la situación de la niñez y adolescencia 2022. La falta de recursos también condiciona la salud: en uno de cada cuatro hogares dejó de ir al médico o al odontólogo. Los detalles del informe

Las cifras son alarmantes: más de un millón de niñas, niños y adolescentes en Argentina dejó de comer alguna comida —desayuno, almuerzo, merienda o cena— porque en casa falta el dinero para comprarla. Esta situación también afecta a 3 millones de adultos que prefieren darles a sus hijas e hijos un poco de comida a alimentarse ellos. Los datos se desprenden de una nueva encuesta presentada este miércoles por UNICEF que refleja, además, que la insuficiencia en los ingresos también genera que los alimentos más consumidos sean carbohidratos: se redujo en un 67% el consumo de carnes y del 40% la ingesta de frutas, verduras y lácteos.

La inestabilidad laboral y los bajos ingresos en los hogares donde viven chicas y chicos son los principales determinantes de esta situación, de acuerdo a los datos de la Encuesta Rápida sobre la situación de la niñez y adolescencia 2022 de UNICEF, representativa de la totalidad de los hogares con niños, niñas y adolescentes en el país, y comparable con los relevamientos realizados por el organismo durante 2020 y 2021. Según este sondeo, uno de cada tres hogares no puede cubrir sus gastos corrientes y el 50% no puede solventar los gastos escolares, entre ellos la compra de libros y útiles.

La falta de recursos también condiciona la salud: uno de cada cuatro hogares dejó de ir al médico o al odontólogo, casi un 20% suspendió la compra de medicamentos. Además, más de un 30% tuvo que recurrir a ahorros o al pedido de dinero a familiares para poder hacer frente a necesidades básicas. Ante esta falta de recursos, el 20% de los hogares recurrió al endeudamiento, principalmente con ANSES, pidiendo un crédito bancario o apeló a prestamistas informales, situaciones que ocasionan presiones adicionales sobre los ingresos disponibles.

“El sistema de protección de ingresos sigue siendo un pilar central para proteger a las familias en situación de mayor vulnerabilidad. La encuesta confirma que el 55% de los hogares con niñas y niños es alcanzado por alguna medida de protección social”, afirmó Luisa Brumana, representante de UNICEF Argentina que, además, señaló: “En situaciones de crisis económicas, el Estado debe garantizar que la niñez y la adolescencia sea protegida a través de presupuestos y políticas inclusivas que les permita salir de la pobreza y la indigencia”.