Caso Ponce de León: se define si seguirán detenidos dos policías

Tras un año y ocho meses de idas y vueltas, en octubre se ordenó la detención de dos agentes. Hoy en un Juzgado de Garantías la defensa planteará un pedido de liberación de ambos. La fiscalía se opondría.

La causa penal abierta por la muerte de Sebastián Ponce de León tendrá este viernes una nueva instancia, a raiz de una audiencia virtual en la cual se decidirá si los dos únicos detenidos hasta ahora por el caso continuarán detenidos o llegarán a juicio en libertad. Se trata de dos agentes de policía que habrían participado de alguna manera en las brutales golpizas que terminaron con la vida del joven.

“Nosotros tenemos un hostigamiento policial permanente, con patrulleros que se estacionan frente a casa y otras cosas que suceden. No quiero imaginarme lo que puede llegar a ser si además estas dos personas quedan en libertad”, dijo a NORTE el padre de la víctima, Rubén Ponce de León.

El caso

Sebastián Ponce de León fue arrestado el 31 de enero de 2019 por policías provinciales que acudieron ante una denuncia de incidentes en un domicilio de Barranqueras. Se trataba de una casa en la que una mujer había tenido una discusión con el joven, de 35 años, en medio de un proceso de ruptura de la relación de pareja que habían mantenido durante un tiempo.

Los uniformados se llevaron a Ponce de León a la Comisaría Primera de Barranqueras. Poco después ingresó al Hospital Perrando con el cuerpo repleto de lesiones y rastros de golpes. Los familiares y amigos que llegaron a verlo en los días de internación declararon que él les contó que había sido objeto de interminables vejámenes.

Todos esos testimonios coinciden en que Ponce de León no se podía explayar demasiado en sus relatos, en parte por los intensos dolores que sufría y en parte porque estaba bajo custodia de la policía, incluso a veces vigilado por uno de los efectivos que él sindicaba como participantes de los castigos.

El 10 de febrero, el joven -padre de una niña- falleció. Para entonces ya se había puesto en marcha una cadena de encubrimientos para desligar a los policías de aquella comisaría de cualquier responsabilidad en el caso.