El jefe de fiscales de Rosario, Jorge Baclini, encendió las alarmas en medio del incremento de asesinatos en las últimas semanas. Aseguró que hay nuevos 30 cargos para incorporar al MPA, entre fiscales y empleados judiciales. Y advirtió que ahora resta el okey del gobierno provincial.

El fiscal general Jorge Baclini planteó una realidad alarmante en relación a los fiscales que investigan homicidios dolosos, cuya mayoría están vinculados con la violencia armada que se vive en el Gran Rosario.

La situación es tan desbordante que la máxima autoridad del Ministerio Público de la Acusación enfatizó que por el incremento de asesinatos perpetrados en las últimas semanas en Rosario, los fiscales de la Unidad de Homicidios Dolosos “colmaron” el cupo de casos que pueden investigar por turno, es decir por siete días.

“El aumento de los homicidios complica las tareas para los fiscales que tenemos asignados en dichas áreas”, aseguró Baclini en un contexto de asesinatos en alza en Rosario, por las disputas territoriales entre bandas antagónicas para imponerse en el negocio ilegal del narcomenudeo y en otras actividades delictivas.

“Más allá de que los fiscales trabajan con un equipo de colaboradores que le prestan asistencia, que no es solamente personal judicial sino también policial, cuando se produce una sobrecarga de homicidios, como ocurre actualmente, la labor se hace mucho más compleja y demanda el reajuste de recursos”, advirtió el jefe de fiscales de la provincia de Santa Fe.

Baclini indicó que desde el Ministerio Publico de la Acusación se realizó un concurso de fiscales que rindieron examen en diciembre del año pasado. “Esperemos que el Ejecutivo esté en condiciones de mandar nuevos pliegos para cubrir cargos vacantes. Y de esta manera poder resolver las cuestiones que hacen a la cantidad de recursos humanos que son necesarias dentro del MPA”, reconoció.