En horas de la tarde, los vecinos de Villa Seitor comentaron que desde la mañana se escuchaba el llanto desesperado de un perro.

El sonido venía de una vivienda ubicada en Julio A Roca 2051 aproximadamente, donde según manifiestan vive una familia de la colectividad gitana.

Un grupo de rescatistas acudió al lugar junto al personal de la Comisaría Décima, quienes dialogaron con el propietario de la casa D.M mayor de edad, le pidieron que haga entrega del can a las personas que están facultadas para atenderlo, sin embargo, el sujeto no solo que se negó a entregarlo sino que además delante de los efectivos presentes insultó a los integrantes del grupo de rescatistas, quienes luego se dirigieron a la Comisaria a realizar las denuncias correspondientes, no solo por el momento violento que vivieron sino también para que el juzgado de faltas intervenga ante la situación de maltrato animal.

Si bien está vigente la ley Ley 14.346 de maltrato animal, en la ciudad de Resistencia falta mucho por trabajar en un protocolo de emergencia ante estos casos.

Sin embargo es de gran importancia realizar la denuncia en sede policial y luego en el Juzgado de faltas, además la labor como sociedad de impulsar la protección de los animales para que se pueda avanzar en este derecho que existe para estos seres vivos.