Ditmar Kurtz, ingeniero agrónomo y jefe de desarrollo e investigación del INTA, dijo acerca del último incendio que golpeó a la zona de los esteros en la última semana. Según el cálculo de la entidad, son más de 1.000 hectáreas afectadas en la zona de Caa Catí.

El profesional informó que, a partir de imágenes satelitales, pudieron calcular cuáles fueron las zonas de incendio. Éstas fueron comparadas con otras recabadas el 22 de julio y pudieron observar dos parches grandes: uno de 789 hectáreas al este de Caa Catí y uno más al sur, de unas 350 hectáreas. “Pasé hoy a la tarde y se veía algo de humo, puede ser que se reavive si no llueve”, afirmó.

Para el ingeniero, la sequía es un agravante de la situación, porque si bien es un invierno atípico, la vegetación aún está seca. “Los esteros están casi secos, por debajo de la normal; si llega a tomar algo de fuego no estamos exentos de que se desaten nuevamente los incendios; hay vegetación seca y poca, por la sequía de los últimos 3 años”, destacó.

También hizo referencia a la significativa la reducción del agua. “En toda la región hace 3 años y medio viene lloviendo menos de lo normal, en algunos lugar 30 a 40 por ciento menos, sumado a las altas temperaturas hizo que perdamos año a año la superficie cubierta con agua”.

En cuanto a estadísticas, el profesional destacó que hasta mayo el porcentaje de agua en los esteros fue de 6,3% y 6,9%. En julio saldrá el nuevo informe, pero las imágenes dan cuenta que no hay agua.

“Llueve muy poco, pero es altamente probable la llegada de El Niño, puede que las precipitaciones de primavera se podrían adelantar las precipitaciones de primavera, que serían normales a superiores a la normal”, destacó.

Asimismo, detalló que tiene que llover de forma significativa para que se recuperen los espacios, a medida que llueva, se irá recuperando. “En tres años tendríamos que haber recibido 3.600 milímetros de lluvia, cuando recibimos 2.400”, cerró el profesional.

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