Vivas, libres y desendeudadas nos queremos. Ni Una Menos”. Con esa frase, mañana, lunes 3 de junio, miles de mujeres volverán a salir a las calles del país para exigir por el fin de los femicidios y la violencia machista en todas sus formas. Por quinto año consecutivo, en la Ciudad de Buenos Aires, la marcha tendrá lugar desde el Congreso hasta la Plaza de Mayo, donde el colectivo de mujeres leerá un documento.

“En el momento de mayor precarización de nuestras vidas, por quinta vez, volvemos a gritar Ni Una Menos. Porque todos los días vemos cómo la violencia económica hace implosión en las casas y en los barrios, sobre nuestros cuerpos”, sostiene el texto de la convocatoria. El reclamo por la interrupción voluntaria del embarazo también estará presente en la convocatoria, luego de que se presentara por octava vez el proyecto de ley que busca su legalización y despenalización. La marcha se repetirá, además, en varios puntos del país, como viene sucediendo cada vez desde 2015, cuando fue la primera marcha, tras el femicidio de Chiara Páez.

El año pasado hubo 278 víctimas de violencia de género en todo el país (255 mujeres muertas, cuatro travesticidios/transfemicidios y 23 femicidios vinculados); según el informe anual de femicidios que elabora  la Oficina de la Mujer (OM) de la Corte Suprema de Justicia de la Nación –con el aporte de juzgados de todo el país–. De allí se desprende, entre otros datos, que en el 83% de los casos, las víctimas tenían un vínculo previo con su agresor: más de la mitad eran sus parejas o ex parejas. Y más de 200 menores estaban a cargo de las víctimas. En el 66% de los casos, el escenario del delito fue el hogar, lo que confirma la tendencia de que la vivienda sigue siendo el lugar más peligroso para las mujeres víctimas de violencia. Desde la Casa del Encuentro, ONG que viene elaborando sus propios registros sobre la base de los casos mediatizados, coinciden: en un relevamiento hecho de los últimos diez años (entre 2008 y 2018), más del 60% de los femicidios ocurrieron en la vivienda de la víctima, que, en muchos casos, era compartida con su agresor. En promedio, en ese período, cada 32 horas hubo una mujer muerta solo por su condición de género, que se traduce en 2.952 femicidios en total; además de 303 vinculados de hombres y niños. (Fuente www.perfil.com). El periodismo profesional es costoso y por eso debemos defender nuestra propiedad intelectual. Robar nuestro contenido es un delito, para compartir nuestras notas por favor utilizar los botones de “share” o directamente comparta la URL. Por cualquier duda por favor escribir a perfilcom@perfil.com