“No se sentía atraído por las chicas jóvenes y no había compartido las imágenes con nadie más”. Fue la explicación de la fiscal Shamalia Qureshi en el juicio contra John  Walker.

El residente de la ciudad de Cleckheaton (Reino Unido) logró evitar la cárcel a pesar de haber sido acusado por tener en su computadora más de 800 imágenes indecentes de niñas de entre 2 y 15 años de edad.

Las autoridades hallaron las fotos durante un allanamiento a la casa del joven de 20 años, luego de una denunciado presentada por una fuente que se mantuvo en reserva.

En el operativo encontraron en los dispositivos del acusado 879 imágenes de menores. En algunas se veía a las niñas posando como modelos, en otras adoptando posiciones sexuales y en 14 se observaba actividad sexual penetrante.

Durante el juicio Walker admitió que comenzó a ver imágenes sexuales de nenas cuando tenía 15 o 16 años.

Sin embargo, aclaró que no obtuvo las fotos de manera intencional sino que las halló cuando buscaba juegos en línea.

Además, el joven agregó que desde entonces viene recibiendo tratamiento y asesoramiento por sus problemas.

El juez declaró a Walker culpable de tres cargos de posesión de imágenes indecentes desde marzo del 2015 hasta diciembre del 2017.

“La sentencia de prisión no ayudaría al público en absoluto”, consideró el magistrado, quien le dictó al acusado una orden comunitaria que incluye 40 días de rehabilitación y un programa de 27 días para personas que cometen delitos sexuales en línea.

Asimismo, el juez ordenó la destrucción de los dispositivos de Walker y que pague las costas judiciales, y una multa de 85 libras (unos 107 dólares) por víctima.