Externos agredieron y dejaron en grave estado a un joven

El pasado 31 de enero fue una noche para el olvido, le peor suerte le tocó a un hombre de 32 años, quien recibió una brutal golpiza por parte de policías que realizan trabajos correspondientes al servicio externo.

Para dar una mejor información general, cabe señalar que cada comisaría cuenta con personal que realiza tareas de “SERVICIO EXTERNO” fuera de la unidad específica y de investigación de cada hecho delictivo, lo que hace que su labor sea exclusivamente en la vía pública y en horarios que la superioridad lo requiera.

En cada comisaría hay efectivos que están cumpliendo esta tarea y dependen específicamente del Jefe de Comisaria, es decir, que ningún encargado de unidad desconoce las funciones del servicio externo.

Volviendo al hecho aberrante, en la madrugada del 31 de enero pasado dos policías de civil habrían golpeado salvajemente a un joven de 32 años identificado como Carlos Fernandez a quien lo dejaron tirado en calle Seitor, entre calles gobernador Bosch y Delfino, jurisdicción de la Comisaría Quinta.

Según los testigos, los efectivos acusaron al joven de comprar drogas y allí comenzó una discusión seguida de un sin fin de golpes que lo dejaron en grave estado, la información a la que accedió INFORME365 es que éstos policías pertenecerían a una comisaría de Fontana, la investigación a cargo de La Fiscalía en lo Penal Especial de Derechos Humanos, a cargo del fiscal Francisco Daniel Turraca, comenzó inmediatamente y afectó los recursos del OCI ( Órgano de Control Institucional) que depende de la Jefatura de Policía del Chaco, quienes tras aportar datos e investigar lo sucedido el pasado 31, entre el jueves 3 y viernes 4 del corriente mes, habrían separado del servicio a dos policías por el momento.

Sin embargo, en la denuncia que radicó la madre de Carlos, éste último víctima de la brutalidad policial, personal de la Comisaría Quinta también estaría involucrado ya que no asistieron a su hijo cuando llegaron al lugar como tampoco habría recibido una buena atención de parte del personal de salud que llegó en una ambulancia y solo tomó los signos vitales del joven para luego retirarse del lugar.

Hoy Carlos pelea por su vida y sigue luchando simplemente porque su mamá se encargó de levantarlo, llevarlo hasta su domicilio y después de dar aviso a la Comisaría Séptima, recién en ese momento fue trasladado por una ambulancia al Hospital Perrando donde se lo diagnosticó con “traumatismo de cráneo moderado potencialmente grave, con sedación, más antecedente de consumo problemático”.

Posteriormente  los estudios determinaron que padecía contusiones hemorrágicas en el lado derecho de su frente y hemorragia subaracnoidea postraumática, como consecuencia de la salvaje golpiza policial.

Tras constatar varias pruebas recabadas, la justicia dispuso que el personal de Gendarmería Nacional custodie la internación de Carlos Fernandez, quien continúa luchando por su vida en Terapia Intensiva del Hospital Perrando.

Es importante destacar que si bien dos serían los autores del hecho habría mas responsabilidades colaterales, con prudencia vamos a aguardar más datos sobre la investigación por parte de las autoridades judiciales y policiales para ampliar la información.

Las imágenes sensibles fueron autorizadas para su difusión por la familia del joven, como también los datos y documentación que avalan la información brindada en esta nota.